El tranvia de Ocaña

¿No os pensaríais que esto había terminado? Que va....... vuelta a la carga.

En esta ocasión ha sido Andrés Ocaña y su tranvía. No me cae a mi mal este hombre, sinceramente, pero creo que a veces no calcula bien las propuestas que hace. Ya le paso con las naves de Colecor, que fíjate en que follón se metió. Y le puede pasar con el tranvía.

Lo veo muy empeñado en sacarle los máximos réditos políticos al futuro tranvía de Córdoba, proyecto que de momento es tan solo virtual. Claro, que Izquierda Unida es especialista en vender proyectos virtuales, ya nos tiene acostumbrados a sus largos debates sobre propuestas que luego tardan décadas en ver la luz, si es que la ven.

La cosa es que, si hace unos meses eran las catenarias, ahora anda empeñado en como encajar el tranvía en la Ribera. Y no se le ha ocurrido otra cosa que QUITAR LOS AUTOBUSES.

Tendría su lógica el asunto si el recorrido que en su día haga el tranvía es coincidente con el que realiza una línea de autobús. Mejor para todos, ya que AUCORSA podría liberar recursos para ofrecer otros servicios.

Pero el problema no es tan sencillo. Por la Ribera pasan tres líneas de autobús, no una, que comunican diferentes zonas de la ciudad y lo lógico sería que, antes de lanzar ninguna propuesta de este tipo, se estudiase que impacto puede tener sobre los servicios que presta actualmente AUCORSA.

Es más, primero habría que ver el impacto que va a provocar el tranvía en la actual configuración del transporte público, para luego analizar la viabilidad de cerrar determinadas calles al paso de los autobuses, no nos vaya a salir al final más caro el collar que el perro.

Esto exigiría abandonar la visión meramente urbanística que Ocaña tiene del tranvía, y adoptar un enfoque más dirigido a mejorar la movilidad en nuestra ciudad. Para ello debería contar con personas que entiendan de transporte público, de las cuales en AUCORSA hay bastantes.